ESTABULACIÓN EN LIBERTAD. BIENESTAR ANIMAL

ESTABULACIÓN EN LIBERTAD. BIENESTAR ANIMAL

Es indiscutible que los caballos que gozan de libertad de movimientos y capacidad de socializar con otros caballos gozan de una mayor salud psíquica y física, seguramente porque es un sistema que se asemeja a su hábitat natural. Las piaras de caballos salvajes se mueven por instinto a través de las praderas en formaciones compactas mientras buscan forraje, agua, sitios para revolcarse y otras actividades habituales.

¿Es posible acondicionar tu finca para que tus caballos disfruten de una estabulación en libertad en condiciones similares a las que le ofrecería la naturaleza? Puede lograrse con una inversión no muy elevada. Se trataría de crear un circuito o camino vallando diferentes zonas de la finca, estimulando el desplazamiento de los caballos por el mismo. Esta ruta debería ser tan ancha como sea necesario para la actividad desarrollada. Es decir, más estrecho en áreas designadas simplemente para que los caballos se muevan y más ancha en sitios donde se pararán, acamparán, comerán, dormirán, descansarán, etc. Dependiendo de que el terreno sea propio o alquilado y del gasto que queramos realizar, instalaremos el vallado con unos materiales u otros, escogiendo entre la amplia oferta existente en el mercado.

El movimiento en los caballos es muy necesario para mantener los cascos en perfecto estado y al caballo sano a nivel psicológico

Aparte del contrasentido de tener unos animales de deporte encerrados 23 horas al día, la estabulación habitual en boxes o recintos cerrados produce en los caballos efectos psíquicos negativos que se traducen en irritabilidad, aburrimiento, aparición de vicios de cuadra, incluso depresión. También puede ser causa de muchas afecciones y enfermedades como cólicos, infosura… Permitir a los caballos gozar de una libertad parecida a la natural, no solo colaborará a que tengan una mejor actitud y salud global, sino que puede ser rentable en términos económicos suministrando una alimentación adecuada a base de heno. Eso sí, es imprescindible disponer de la posibilidad de instalar el circuito y lograr que los caballos estén en movimiento por el mismo. Este recorrido debe planificarse por terrenos de diferente formación, con subidas, bajadas, zonas llanas y sobre superficies variadas como grava, piedras, arena que colaboren a un buen mantenimiento de los cascos.

El sistema digestivo del caballo no está diseñado para soportar largos intervalos de ayuno interrumpidos por consumiciones puntualmente abundantes de comida, todo lo contrario. Por eso y para estimular el movimiento, deberemos prever varios puntos designados para instalar el forraje, que es la alimentación más natural posible. Para ello, la instalación de redes para heno o forrajeras será imprescindible. Las redes y forrajeras ayudan a evitar que el heno se disperse por la fuerza del viento y a que se mezcle con la tierra y los excrementos, lo que ocurriría de estar tirado en el suelo. Igualmente deberemos situar varios puntos durante el recorrido donde el animal pueda beber. Lo ideal es instalar bebederos o abrevaderos automáticos que mantendrán el agua limpia y fresca. En principio desaconsejamos la instalación de forrajeras o redes de gran capacidad de almacenaje, porque ello haría que los caballos permanecieran mucho rato alrededor y lo perfecto es que se mantengan en movimiento. El tamaño de las redes vendrá determinado por el número de animales sueltos y la disponibilidad de personal para rellenarlas regularmente.

¿Cuánto espacio necesitamos para hacer un recorrido de estabulación en libertad válido?

Los caballos que viven en libertad suelen recorrer un promedio de 15 o 20 km. diarios buscando comida variada, agua fresca, sitios donde revolcarse… por lo tanto, el circuito debería ser tan amplio como sea posible. En las fincas valladas, utilizar la valla perimetral como límite exterior del camino puede ser interesante, porque los caballos limpiaran de hierba la zona haciendo un estupendo cortafuegos y es una manera de economizar, ya que el vallado estará instalado previamente. Que los caballos salvajes caminen 15km diarios no significa necesariamente que tengamos que disponer de un circuito de esa extensión. El camino podrá tener un diseño serpenteante que aproveche el terreno y los caballos podrán dar varias vueltas al mismo. Hablando en términos de superficie, digamos que puede instalarse un circuito adecuado a partir de 1 Ha., que no es una superficie exagerada para una finca rústica.

Vallado de pasillo aprovechando el perímetro exterior de la finca añadiendo cercado electrificado para hacer un recorrido de estabulación en libertad

¿Qué tipo de vallado para caballos usar?

Antes comentábamos dos circunstancias que inciden en este aspecto de la instalación : una, que la finca esté vallada perimetralmente y dos, que la finca sea propia o alquilada, ya que en éste último caso seremos más reticentes a realizar inversiones no recuperables. La forma de instalar un vallado estable más fácil, duradera y económica es utilizar madera tratada. En éste caso bastaría con una valla de un solo poste horizontal. Si no queremos utilizar un vallado de madera tratada tradicional, podemos usar solo postes verticales y un cercado electrificado, mucho más barato de instalar y recuperable casi en su totalidad. Para soportar el cercado eléctrico bastará con colocar postes cada 4 ó 5ms. La elección entre cinta o cordón es muy personal, pero es cierto que el cordón ofrece menos resistencia al aire y por lo tanto da menos problemas de roturas. Existen picas de plástico muy económicas para cercado electrificados temporales, pero disponen de un pincho que clava máximo 20cm en el suelo y para este tipo de circuito permanente, no las creemos adecuadas. También se podrían usar picas de acero, aunque se precisan unos aisladores especiales.

Los beneficios de la estabulación en libertad se podrían resumir en : mayor grado de salud psíquica y física, mejor actitud y carácter del animal, ejercicio constante, reiterado y a voluntad; alimentación adecuada, de un coste inferior y menor tiempo de preparación antes de montar.

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